Los empresarios argentinos interesados en comprar la parte de Telecom que están vendiendo los italianos se encontraron, por estos días, con una sorpresa. Entre los requisitos para participar de la contienda existiría la necesidad de presentar un aval por US$ 300 millones. “Hay que dejarlo depositado por un año, sin garantía de las acciones que ellos van a vender, no estamos muy de acuerdo”, explicaron a Clarín dos de los postulantes que pidieron no ser identificados.
Ayer, Eurnekian-Gutiérrez, Román e IRSA presentaron una nueva oferta, pero que sólo sería para seguir negociando. “El asunto está muy trabado, pareciera que los italianos no quieren vender”, esgrimieron quienes siguen la negociación. Matías Garfunkel, que estaba con Eurnekian, se separó del concesionario y confirmó su interés por Telecom hace una semana.
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