Telecom Italia monopolio sin compromiso

La semana pasada el Canciller Héctor Timerman planteó ante el comité de descolonización de la ONU, el tema medioambiental, planteando como eje del mensaje Argentino el doble standard que las potencias asumieron durante la administración de las colonias y como ese doble standard se había instalado culturalmente en las potencias.
Básicamente lo que a las empresas les está prohibido hacer en sus países de origen por niveles altos de compromiso con el medio ambiente asegurados desde la normativa, muchas veces lo hacen estas empresas en los países periféricos con niveles de compromiso mucho menor con el medio ambiente.
La responsabilidad de estas empresas es una en casa, donde los empresarios mandan viven, respiran y mandan ,a sus hijos a la escuela y otra en países donde no les preocupa cuidar el medio ambiente, porque no sienten ni pertenencia ni pertinencia, y donde tampoco la legislación los obliga a cumplir lo que la ética colectiva y la moral individual debería marcarles como eje de conducta.
Junto con esta noticia nos enteramos que Telecom Italia esta acusada e investigada en Italia por prácticas monopólicas.
El regulador antimonopolio de Italia anunció que que Fastweb, el segundo operador de telecomunicaciones del país, y Wind, el tercer operador de teléfonos móviles del país, habían alegado que Telecom Italia estaba demorando la activación de los servicios solicitados por los rivales y que estaba operando un “boicot técnico” evitando que las otras empresas tuvieran acceso a su red.
La agencia dijo también que había habido acusaciones de que Telecom Italia estaba usando descuentos agresivos en algunos servicios que se ofrecían a precios inferiores a los niveles de los costos en los que incurrían sus rivales.
Seguramente Telecom Italia deberá dejar de lado estas prácticas por la fuerza de la ley italiana, mientras tanto en la Argentina, no solo que ejerce una situación monopólica al permitirle a Telefónica estar en las dos compañías telefónicas, sino que además busca ganar tiempo e intentar quedarse con toda la compañía Telecom Argentina.
El gobierno argentino y la sociedad toda saben en carne propia lo que es un monopolio en la telefonía, y existe un amplio consenso para que esta situación monopólico se desactive. Solo desde algún os medios oligopólicos se defiende la postura de Telecom Italia, el consenso que aparece claro en la sociedad y en el gobierno no se ve reflejado en algunos medios importantes que mas que volcar análisis o expresar opiniones parecen corporizar estrategias .
Lo esencial, aquello que como decía El Principito, de Saint Exupery, es invisible a los ojos, hoy se encuentra invisibilizado desde estos medios, lo críticamente esencial es que las telecomunicaciones deben estar desreguladas, libres de toda practica monopólica, y en lo posible dado lo estratégico de la actividad, en manos argentinas. Solo aquellas nos brindarán el compromiso que las empresas revelan en su lugar de pertenencia y pertinencia.