miércoles, 7 de julio de 2010

¿El Futuro del país lo decide la voluntad de la mayoría o los editoriales de La Nación y Clarín?

Más de las tres cuartas partes de la población (el 81 por ciento) está de acuerdo con que homosexuales y heterosexuales tengan los mismos derechos. Apenas un poco menos (el 69 por ciento) se declara de acuerdo con el proyecto de ley de matrimonio civil que la Cámara de Diputados aprobó en mayo. Más de la mitad de los ciudadanos (el 57,6 por ciento) está en desacuerdo con que la Iglesia católica rechace el matrimonio entre personas del mismo sexo; la mayoría de esas personas se define como católica practicante. Así lo asegura un estudio que la consultora Analogías realizó a nivel nacional a mediados de junio, en 1250 casos.
Los números trazan un panorama notablemente menos polarizado y opositor al proyecto de ley, de lo que se traduce en sobre todo en la cámara de senadores y desde algunos diarios como La Nación.
Los senadores y senadoras que se oponen al proyecto difícilmente puedan argüir que lo hacen porque así lo quieren sus electores a quienes deberían representar ya que que el pueblo no delibera ni gobierna si no es por medio de sus representantes.
Una situación sugestivamente similar se da en lo que hace a uno de los sectores mas estratégicos de la nación, las comunicaciones.
Allí la gente, el gobierno, los trabajadores del sector están claramente de acuerdo que quieren que la telefonía quede en manos nacionales y sin ningún tipo de monopolios. Sin embargo a este enorme, por su volumen y legitimidad, sector mayoritario, se le opone un grupo de quizás tres o cuatro columnistas de diarios de gran tirada, algún comunicador radial y alguna voz en el poder judicial.
Una encuesta de 2800 casos en todo el país realizado por los propios trabajadores de las dos empresas Telecom y Telefónica reveló que el 76% de los encuestados prefiere que las comunicaciones permanezcan en manos argentinas.
Esta encuesta que ha sido invisibilizada por los medios que marcan la agenda mediática.
La nueva de ley de medios dará voz, esperemos, a mas gente, y si hay mas voces las posibilidades que el futuro del país sea regido por la voluntad de las mayorías y no por dos o tres columnistas muy motivados de dos diarios, aumentan.

No hay comentarios:

Publicar un comentario